Córdoba CF 1-0 Girona: "Porque también se gana sin hacerlo bien"

"El Córdoba CF vence por la mínima a un Girona muy desacertado"

Los equipos grandes ejercen esa maestría por muchas razones, por saber jugar, por hacerlo bien y de manera vistosa, por conseguir resultados y victorias, pero hoy al Córdoba le llegó una nueva manera, que es ganar sin hacerlo bien. 

En un partido donde los cordobesistas fueron superados en ocasiones por el Girona, se encontraron con el regalo de un penalti gracias a Caballero al que derriban infantilmente. La pena máxima es transformada en dos tiempos por Borja García que hacía el único tanto del encuentro. Todo eso tras que el conjunto catalán hubiera dispuesto de varias ocasiones de gol, a cada cual más clara que el anterior y tras haberles sido anulado un tanto al conjunto visitante . Alberto, meta blanquiverde, se tuvo que emplear a fondo y cuando éste era vencido, ahí aparecía la zaga de Paco Jémez para evitar encajar el gol, así Fuentes salvó la más clara para los visitantes, el defensa del Córdoba CF bajo los palos evitó el gol tras el remate de Jandro.

El segundo tiempo no se diferenciaría mucho de la primera parte, con un Córdoba buscando su juego habitual para llegar al gol en jugada trenzada, sin embargo, el peligro lo llevaban las botas de los jugadores del Girona, únicamente la entrada del jóven Fede Vico, hizo que la búsqueda hacia el gol de la tranquilidad fuese más clara, mientras el Girona ponía ocasión tras ocasión la zaga y el meta local, Vico, era el que creaba ocasiones de peligro para los suyos. Primero tras una buena acción individual, pone un centro que Alberto Aguilar manda al palo, y luego buscando el disparo desde la frontal obligó al meta Santamaría a emplearse a fondo para evitar el segundo tanto cordobesista.

Pese a ello el tramo final del encuentro sería pura angustia para los blanquiverdes que sufrieron la gota gorda para amarrar los tres puntos en casa y así escalar hasta la sexta plaza de la tabla. Tal y como dijimos, el Córdoba va cogiendo y puliendo esos defectos y características necesarias para ser grande, primero fue la falta de gol y llegaron las goleadas, luego la casta para remontar y ahora finalmente, como hacen los grandes, ganar sin jugar bien.